Rutilla bocadillera a BEGUES.

Por Jaqueton:


El domingo diecinueve de agosto, atacamos una salida de las denominadas “bocadilleras”.
Es decir… una rutilla simpaticorra, en la que cada cual se procura su pitanza –bien en casa, bien en el punto de encuentro-, para así almorzar todos juntos en un marco distinto al habitual.
En ésta ocasión… elegimos las barbacoas de Begues. Lugar que además de ofrecer una ubicación excepcional… nos da la posibilidad de recorrer una ruta curvera y bonita donde las haya.

La mañana del diecinueve… Tito y un servidor de ustedes, salíamos de La Blanca Subur… poniendo rumbo a Vilafranca. Concretamente… al local de “los chinos” que se encuentra en La Rambla de la Girada… un poquito más arriba de nuestro bien amado Monterrey.
Y es que nuestra Sede… éste año ha decidido cerrar los domingos de agosto. Y claro, “destetados” como quedamos el pasado día cinco… decidimos buscar un “sucedáneo” para nuestros encuentros en ese veraniego mes.

Así que tras llenar los sedientos depósitos de Totina y Guillermina, llegamos a la rotonda donde se encuentra el boliche de marras. Y allí, como no… nos encontramos con el simpatiquísimo Juanpoti…! Que como siempre, era el primero en llegar al punto de encuentro.
Poco después, llegaron Pitu y Kevin. Que a lomos de su preciosa ST7, arribaban después de salir de El Plà del Penedès.
Y todos juntos, arrancamos con los cafetines mañaneros y cachondones… que uno tanto echa de menos cuando no hay salida.

Allí llegó también Juan. Sobre su burrra… que a partir de ese día se llamará: “Ninja”…!! Je, je, je…
Luego… Pepe!! Que a pesar de estar de guardia… no quiso perderse el cafetín mañanero…
Heavy, acompañado de su hija Sandra, llegó un poquito más tarde.
Seguido muy de cerca de Jordi883… Choppers, y Montse.
Con quienes cerrábamos el grupete mañanero, y con quienes disfrutamos de uno de los momentos más dulces, emocionantes, y sabrosones de cualquier salida:
Los cafetines!!

Mención especial merece, que en una mañana tan especial… el compañero Tito le hizo entrega a Juanpoti de un parche de los que damos a los amigos…!!
Parche acreditativo, no sólo de la amistad y compañerismo que lo promociona… si no del orgullo sin límites que sentimos todos, cuando vemos iluminarse la cara del compañero al que se lo entregamos…
Desde aquí… muchas felicidades Juan…!!!
Sinceramente… un placer gigante poder compartir encuentros y salidas contigo…!!!

Una vez cafeteados todos… nuestro Capitán montó el grupete de ruta, para arrancar con ella cuanto antes…
Así que con todo el dolor del corazón… nos despedimos de nuestro amigo Pepe, que regresaría a casa. Ya que en ésta ocasión –a diferencia del día cinco- no podría acompañarnos en el almuerzo…
Hasta la próxima , company…!!!

Salimos todos en tromba de la rambla de la Girada… poniendo rumbo a la N340. Carretera que seguiríamos… hasta Avinyonet.
Pero… justo saliendo de Vilafranca, una perrilla perdida nos tocó a todos la fibra del corazón… al ver que intentaba meterse en el grupo, y seguirnos…
La perrilla, primero anduvo desorientada. Y gracias a que los coches frenaban… el desenlace fatal –y que todos temíamos- no se produjo.
Pero como digo, la pobre intentó en varias ocasiones meterse en medio del grupo de motos… así que nuestro Capitán, nos encaminó hacia una gasolinera donde pudimos parar… y descubrir que un alma –caritativa y enlatada- decidió hacer lo mismo.
Mónica, que así se llamaba la chica que paró… Decidió llevarse a la perra en su coche. Pues como comento, si la pobre desdichada se quedaba en la carretera, el final estaba muy claro…
Y es que a juzgar por su estado, lo más seguro es que algún hijo de mala madre sin escrúpulos, la hubiera abandonado a su suerte. (Como sucede tantas y tantas veces…) Y de ahí que la pobre perrita anduviera perdida, desorientada, y falta de amor y cariño… (Algo que quedó muy claro, cuando vimos –emocionados- cómo anhelaba caricias y carantoñas…)
Así que Mónica –con la ayuda de Pitu y Kevin- la cargó en su coche… y yo, le pedí el teléfono para que –al día siguiente- nos pudiera comunicar que –felizmente- esa misma mañana le encontraron un nuevo hogar. Un nuevo dueño… Y una nueva y amorosa vida.
Ole, ole, y ole…!!!
Bien por la perrita… y por el nuevo “papá” que le tocó en suerte…!!!

La ruta prosiguió sin pausa, hasta Avinyonet. Donde viramos a mano fascista… buscando la carreterilla –sinuosa carreterilla- que nos llevaría hasta las barbacoas añoradas.
Curvitas… y una ruta bien tranquila.
Una ruta relajante y sabrosona… que sólo se vio salpicada por la imprudencia de un –lamentablemente- compañero motero, que a lomos de una R… se comió literalmente el carril contrario, y a poco estuvo de dársela con Tito…!
La madre que lo parió!!
Si es que es verdad que en este mundo tiene que haber de todo, coñe…!
Pero es que luego… pagamos justos por pecadores!!
Y encima, por la imprudencia de un mal nacido… uno puede llevarse un recuerdo para toda la vida; si tiene la suerte de no perderla allí.
Mira que es fácil…!
Quieres correr? Pues al circuito!!
Que es barato… No molestas a nadie… Y si “la cagas”, te jodes sólo tú.
En fin…
Demos gracias que todo quedó sólo en un susto... y que a los pocos minutos nos encontrábamos ya aparcando felizmente las burras en las barbacoas… olvidando el incidente.

Aparcamos monturas… Y tras comentarles a los responsables nuestra intención de llenar el estómago con las pitanzas que traíamos, nos dispusimos a pillar los bebercios… y a repartirnos en dos mesas. Pues la hora del almuerzo había llegado!! Je, je, je…
Allí sentados, le fuimos dando caña a los bocadillos… al tiempo que disfrutábamos de una tertulia espectacular.
Bajo los pinos… a la sombrica… Recreándonos en la segunda mitad de nuestro lema:
Tragones…!! Je, je, je…

Una vez almorzados, decidimos llegado el momento de echar los cafetines.
Así que nos dirigimos a la barra del establecimiento… y Jordi883, y éste que suscribe, pedimos –además del cafeínico elemento- los tacos y la tiza…! Pues íbamos a echar un billarín…!
Mecagüenlaputa!! Nunca fui lo que puede decir, “bueno”… Pero tampoco pensaba yo haber perdido tanto en estos años…
Y es que… nada más darle los primeros toques a la bola, me di cuenta que lo que es teoría… todavía lo llevo bien. Pero la práctica… ja! Eso… eso es harina de otro costal…!! Je, je, je…
Ley de vida, compañeros…! Pues luego me lié a echarle cuentas… y palmo arriba, palmo abajo, hace la friolera de trece o catorce años que no juego –como jugaba- de forma habitual y diaria… Y claro. Se nota…

Así que allí estuvimos echando el billar… cafeteando… y disfrutando de la sobremesa. De la tertulia… y de la grata compañía de todos.
Un momento especial… para vivir un nuevo momento más especial…!!
Y es que el compañero Choppers… le hizo entrega a Heavy de otro parche para amigos…!!
Parche especial… entregado a alguien también muy especial…
Felicidades Josep!!!
Un placer y un orgullo, saber que te sientes tan a gusto con nosotros… como nosotros contigo…
Ahora –como comentamos esa mañanica…- sólo nos queda buscar una nueva mañana, para hacer una excursión a Goya Motos –donde AMICUS Moto Grupo ostenta descuento…- y procurar chalecos para esos parches…! Je, je, je…

Después de los cafetines… y de los tronchantes momentos vividos allí, llegó el momento de tomar la decisión de continuar con la ruta.
Ruta que primigeniamente… terminaba en Vilafranca, donde echaríamos la popular “cervecilla de fin de ruta”.
Pero… teniendo en cuenta la hora que era, y que Tito y mi menda lerenda ese día currábamos de tarde… terminamos acordando que finiquitaríamos la rutilla en Sitges. Y de ese modo, todo lo que le “robábamos” a la ruta… se lo entregaríamos al tiempo que pasaríamos juntos.
Que es –sin lugar a dudas- lo más importante de las salidas…

Así que salimos de allí… y pusimos proa a Castelldefels. Donde pillaríamos las famosas Costas del Garraf… que nos llevarían –después de zamparnos sus tropecientas curvas- hasta La Blanca Subur.
Y una vez allí, después de aparcar las burricas debidamente… conquistaríamos la terracita de “Can Gregori”. Local donde cerveceamos, cada vez que terminamos ruta en Sitges…

Una vez en la terracita… y con los vasos de fresquísima cebada en nuestras manos… recibimos la visita de mi adorada Eolia…!! Que hasta allí se acercó, a disfrutar –cuanto menos- del momento final de la salida…
Y menos mal que sólo vivió el momento final…!! Porque si llega a vivirlos todos… hubiera vivido también el encuentro con la perrita. Y a estas horas, compañeros… ya os aseguro yo que en nuestra casa seríamos uno más… je, je, je…

Como suele decirse -y en momentos así, es totalmente cierto…- cuanto mejor se lo pasa uno, el tiempo parece correr más deprisa.
Y sin darnos cuenta, llegó el momento de dar por terminada la salida… y despedirnos unos de otros. Pues el reloj -inexorable como siempre- avanzaba a pasos de gigante!
Así que arrancamos con los besitos, abrazotes, y arrumacos…
…y poco a poco, pero sin pausa, nos fuimos despidiendo… esperando que llegue cuanto antes, la próxima cita…!
Que ésta vez, lamentablemente… tardará casi un mes en llegar.
Pues sin querer… en AMICUS también hemos hecho vacaciones. Y si no pasa nada… la próxima salida –que no el próximo encuentro- la tenemos pronosticada para el ocho de septiembre…

Así que crucemos los dedos para que El Gran Manitou sea benevolente…
…y nos permita reencontrarnos y disfrutar de lo que más nos gusta, con paz y alegría…!!
Y de ese modo… pegarnos un suculento almuerzote, después de una jugosa rutilla… compartiendo esos gratos momentos que nos procura la amistad de éste modesto grupete, del que cada día que pasa me siento más orgulloso de formar parte…
Oh, yeah…!!!

NaCluT!!!

Pendèsrutilla, y almuerzo en ELS MONJOS.

Por Jaqueton:


El cinco de agosto, teníamos salida… Pero una salida incierta. Pues a pesar de tener clara la rutilla, y que nuestra intención era realizarla para acabar almorzando en la Sede… los amigos del Monterrey nos comunicaron que durante éste mes de agosto cerrarían todos los domingos.
Qué putada…!
Pero bueno. Será sólo durante el mes de agosto… y lo podremos capear con dosis “quita-mono” de cafelitos entre semana… je, je, je…
El caso es que la mañana del cinco, quedamos en la zona de la Girada… con la clara intención de cafetear en cualquier garito que estuviera abierto. Y así, cafeteando… decidir dónde dirigir nuestras burras, en pos de un suculento almuerzo.

Aquella mañana… mi adorada Eolia y yo, montamos en Guillermina y encaramos gratamente la rutilla hasta Vilafranca.
Trayecto tranquilo donde los haya… durante el cual, uno siente la emoción pre-ruta que le arranca en los pirindolos, para luego ir esparciéndose por todo el cuerpo… je, je, je…
Llegamos a la rambla… y ya teníamos allí al amigo Juan! Que nos esperaba con cara seriota, al darse cuenta que ninguno de los garitos que pueblan las aceras de la zona, había abierto sus puertas…
Menuda faena!
Se adivinaba un encuentro pre-ruta sin café…


Luego llegó el amigo Tito. Que en ésta ocasión no subió con nosotros desde Sitges… porque quehaceres domésticos le mantuvieron en casa hasta más allá de la hora de salida. Con lo cual… llegó un poquito más tarde que nosotros. Pero apenas –si me apuráis- unos minutos…


Ahí estábamos charlando… cuando apareció una Intruder 125, negra y reluciente… sin asiento de acompañante, y montada por un tipo con chupa tejana…
Heavy!! O sea, Josep…!!
Que aquél día se estrenaba con las salidas AMICUS… y así pudimos –por fin- ponerle cara y ojos, al nuevo compañero de aventuras. Y que hasta la fecha, sólo conocíamos por el foro…
Bienvenido company…!!!
La verdad… me consta que el estreno le encantó…!Pues ya está deseando repetir… je, je, je…
Y ciertamente, el sentimiento es mutuo. Pues a todos nos encantó el sentido del humor y el cachondeo, que siempre lleva encima nuestro –desde ya- amigo Heavy…


Los siguientes en llegar, fueron Jordicamu600, y Pepe…!
Éste último –encontrándose de guardia- venía dispuesto a echar el cafetín… pero como en ésta ocasión no tuvimos, tuvo que conformarse con la amena charla que llevábamos… allá en la acera de la calle, que cada vez se quedaba más pequeña…


Luego, llegaron los amigos Choppers e Iván. Que a lomos de su dulce montura… llegaban desde Igualada para compartir con todos, ruta, almuerzo, y el más puro de los cachondeos…! Je, je, je…
Y ya estábamos todos!!
Bueno, todos lo que nos íbamos a encontrar ese día… pues lamentablemente –como siempre- algunos de los compañeros no pudieron compartir ésta salidilla de principios de agosto…
Besos, cariños, arrumacos, y abrazos para todos, conforme iban llegando…
…y llegó el momento de decidir dónde ir a menear el bigote! Pues salida sin café… la toleramos. Pero sin almuerzo… je, je, je…


Y fue precisamente el compañero Heavy, quien nos ofreció las exquisiteces que preparan en el bar en el que trabaja su mujer –Luci, a quien conoceríamos en breve-, y a todos nos pareció una idea de lo más apetecible…! Pues así conoceríamos a su señora… Conoceríamos un lugar nuevo donde menear el hocico… Y –lo más importante-, se encontraba lo suficientemente cerca de Vilafranca, como para que Pepe pudiera venir…!
Así que con las ideas claras –en cuanto a ruta y destino se refiere-, decidimos no perder un segundo más… y tras montar el grupo de ruta, iniciarla cuanto antes! Pues las ganas estaban ya… por encima de los límites de seguridad…
Antes, esos sí… acordamos el lugar y el horario con Pepe. Pues encontrándose de guardia como se encontraba… la ruta se la perdería. Pero no el almuerzo…!
Ya que lo organizamos en Els Monjos… y esa localidad –como he comentado antes- entraba en el radio de almuerzos posibles para nuestro compañero…! Ole, ole, y ole…!!

Nos despedimos tristemente de Pepe… y arrancamos con la “Penedèsrutilla” que nos había preparado nuestro Capitán…
Salimos de la capital de l’Alt Penedès… y tiramos –a lomos de nuestra vieja amiga nacional- dirección a El Vendrell.
Pero a la altura de Santa Oliva… pillamos la vieja carretera de Valls. Por la que ruteamos en fila india, metiéndonos por el cruce de La Bisbal.
De allí… tiramos de cara a Sant Llorenç, Sant Jaume del Domenys, La Múnia… y ruteando por esas sinuosas carreteras secundarias, que tanto nos molan… y antes de que nos diéramos cuenta, la rutilla terminaba gloriosa y nuevamente, en Vilafranca.
Y es que… cuando uno se lo pasa bien, el tiempo y el espacio pasan sin pesar. Y la verdad es que la rutilla –en aquél momento- la podríamos haber alargado “in eternum”… je, je, je…
Pero no…!
Los estómagos empezaban a rugir con furia visigoda… y era menester darles algo de yantar! Así que pusimos rumbo a Els Monjos… donde nos esperaba una terracita sandunguera, donde reposaríamos al tiempo que le dábamos a las muelas.

El amigo Heavy, tras la indicación del Capi, se puso en cabeza para guiarnos hasta allí. Y en un periquete, ya estábamos subiendo las motos a la vasta acera… aparcándolas junto a unos olivos que la embellecen.
Luego, nos sentamos en la mesa que ya nos tenían reservada… y una simpatiquísima Luci –esposa de Heavy- nos atendió procurándonos cuanto se nos antojó para zampar…! Je, je, je…
Bocadillotes de salchichas con cebolla… de chistorra… de tortilla, y de lomo… Y hasta un estupendo platico de pollo, huevos fritos, y seques, que se comió Tito… que no se lo saltaba un torero…!!

Al poco de estar allí, con puntualidad británica, llegaba el compañero Pepe a lomos de su VN900.
Tomo asiento… y se dispuso a disfrutar del almuercete con todos…!
Como siempre… cachondeo puro en la mesa, comentando los previos… y disfrutando luego de una estupenda sobremesa.
Luci, siempre atenta… nos procuró sombrillas que –si cabe- nos hicieron más placentera la estancia. Y allí nos tiramos –como quien dice- el resto de la mañana.
Comentando anécdotas… contando chistes… y permitiendo que el recién llegado a la colla –Heavy- conociera una de las facetas más importantes de AMICUS:
La necesidad que sentimos todos, de pasarlo bien y reírnos de todo, cada vez que tenemos la suerte de juntarnos…!

Pero… como comenté antes, refiriéndome a la ruta… el tiempo pierde referencia cuando uno la pasa bien.
Y sin darnos apenas cuenta… ya habíamos pasado peligrosamente el mediodía… y era menester tomar una determinación.
Así que todos a una –en plan Fuenteovejuna- decidimos dar por tristemente finalizada, la salidilla. Y tras ir “retratándonos” con la “dolorosa” de cada cual… nos despedimos cariñosamente unos de otros, preparándonos para la penosa partida…
Y es que, si la salida no tuvo café… la ruta, al terminar para el almuerzo… tampoco tuvo “cervecilla de fin de ruta”.
Con lo cual… nos fuimos abrazando y besuqueando por etapas, despidiéndonos allí mismo. Pues aunque algunos partiéramos en grupo… ya no pararíamos hasta casa.

Allí se quedó el simpatiquísimo Heavy, con su no menos simpática Luci. Que si todo va bien… y me parece que sí… compartirá muchos más encuentros, salidas, y rutillas…!!
Pepe y Jordi a su vez, partieron juntos …
Y por otro lado, Tito, Choppers, Iván, Juan, Eolia, y yo, formamos un grupete de cuatro motos… que cual racimo de uvas, se fue desgranando conforme pillamos los diferentes desvíos.
Y así, finalmente y tras despedirnos de Tito… Eolia y yo arribábamos al parking del que habíamos salido esa mañana, felices. Alegres y orgullosos… Deseosos de que llegue cuanto antes, la próxima aventura de AMICUS!! Oh, yeah…!!!

NaCluT!!!