diumenge, 22 de juny del 2008

Maño-salida a ZARAGOZA.

Por Jaqueton.

Qué de tiempo hacía -ni me acuerdo- que no me levantaba para ir de ruta siendo aún de noche...!! Jué.... Como si de una salida invernal se tratara... lo mismito.... je, je, je....

El 22 por la mañana, sonó el despertador a eso de las 4:45.
Cuando aún no están puestas las calles, las farolas están prendidas, y los transeúntes borrachos....
Pero aún siendo tan pronto, me levanté contento, feliz y despejado.... Y es que la ocasión lo merecía.... nos íbamos a Zaragoza!!

Así pues, saltar de la piltra, echar un fax al Sr. Roca, ducharme y arreglarme, fue todo uno. Eché un vistazo al foro, me tomé un zumito... y antes que me diera cuenta, ya estaba con los pellejos puestos, el casco en una mano, y en la otra la esperanza de correr una aventura de las que se recuerdan durante mucho tiempo...

No serían aún las 5:30 cuando abría la puerta de casa, no sin antes despedirme de mi adorable y amadísima esposa que estaba durmiendo... –como es normal a esa hora- y darle un par de mimitos a nuestra cuca perrita, Sara... y enfilé las escaleras para la calle.
Me acerqué al cajero de la esquina, rodeado de crápulas para los cuales, el sábado todavía estaba vivito y coleando... pero a quienes el inminente Lorenzo, vendría en un ratico a sacarles de su dulce sueño, y devolverles a la más cruda de las realidades....
En fin, que estaba yo ya más que preparado, cuando me dispuse a ir a despertar a mi Bilú It... pero estaba despierta!! Bueno, despierta, y ansiosa de devorar kilómetros conmigo...!!

Así pues... no tardé mucho en montarla, y poner rumbo al punto de encuentro –esta vez en Vilafranca- donde me encontraría con mis compañeros de ruta...
Subí por la C-15, y extrañamente, no me encontré con ninguno de los gossos que a esas horas acostumbran a pulular por las rotondas y alrededores...
Lo qué sí me encontré –a escasos metros de la primera rotonda de Vilafranca-, fue un par de mozalbetes que pretendían enseñarme no se qué importantes pasos de baile... pero los ignoré, no tenía tiempo, pues me esperaban.... Y enfile la primera de las salidas de dicha rotonda. En su interior, me esperaban Nandu Intruder, y su encantadora esposa Araceli... Puntuales, si señor...! Como tiene que ser!!
Una vez hechas las presentaciones, dados los besitos y apretones de mano, y echados los pitillines de rigor... Montamos nuestras burricas, y pusimos proa a Igualada. Donde cogeríamos la N-II que nos tendría que llevar a nuestro destino: Zaragoza...!!!

A esa hora, ya empezaba a despertar un día, que se presumía claro y despejado. Y aunque el fresquete se notaba.... todo apuntaba a que sería un día caluroso, caluroso...
La luna todavía presidía un clarísimo cielo de un azul intenso, luchando por no ceder su puesto a un joven y caliente sol, que empezaba ya a dejar más que claro que aquél era el inicio de un típico día de verano...
Arribados a la capital de l’Anoia, decidimos ir a echar el café y realizar así, la primera de las muchas “paradas de avituallamiento” que haríamos a lo largo de nuestro viaje.
Pretendimos parar en un bar, que a Nandu le hacía mucha ilusión visitar, por mostrar a su esposa las “mesas anti escapatoria” que allí hay... pero estaba cerrado. Así que nos calentamos por dentro en otro garito cercano, que por las pintas, no hacía mucho que habían abierto... Eran las 6:45. Íbamos más que bien de tiempo...

Salimos de allí, con la intención de enfilar la N-II, y parar en Bellpuig. Punto de encuentro con Huracaan, y con un suculento almuerzo que nos repondría fuerzas, y nos daría energías para continuar el trayecto.
No serían mucho más de las 7:40, cuando pillamos la salida a Bellpuig... y aún no habíamos empezado a repostar nuestras monturas, cuando apareció –puntual como él solo- nuestro amigo y compañero, Huracaan...!
Apretones de manos, abrazos, besitos... –esta vez sin pitillines, pues estábamos en una gasolinera- y salimos de allí siguiendo a nuestro amigo, que nos llevó a un garito que había visitado el día anterior, para acordar que sobre las 8:00 nos acercaríamos a almorzar...
Pero... resulta que el tipo de dicho establecimiento tenía menos ganas de currar que Papá Noel en agosto... –cosa de la que me alegro mucho, y luego veréis por qué- y tuvimos que salir de allí en pos de un lugar más... dispuesto a satisfacer nuestras panzas, que ya hacía rato que se quejaban...

Huracaan, excelente anfitrión y mejor cicerone, nos llevó hasta Mollerussa. Donde se encuentra un barecillo muy simpático y acogedor, con mesitas fuera –sobre el césped- y un servicial camarero que enseguida hizo las delicias de éste que os habla y sus amigos...
La mañana avanzaba impasible, y el sol empezaba ya a calentar... y allí, sobre el césped, el estómago lleno, y conversando con buenos amigos... uno no se quería ir...!!

Pero todo tiene un fin, y nuestro almuerzo no iba a ser menos... Así que, poco más o menos a las 9:30 de la mañana, montamos de nuevo en las burricas y dejamos que Huracaan –de nuevo el inefable Huracaan- nos guiara para pillar la A2...
Huracaan en esta ocasión no pudo acompañarnos... pero una parte de él partió con nosotros acurrucada en nuestro corazón...!

Emprendimos pues, de nuevo, nuestro viaje a través de la A2. La intención era parar unos kilómetros antes de llegar a Zaragoza, y repostar depósitos y gaznates... Pero antes había que pasar Lleida... Llegar hasta Fraga, y empalmar con la N-II que –empieza a estar más apedazada que las maletas del fugitivo-, nos deparaba algún que otro sustillo...

Vimos, conmocionados, un camión calcinado donde perdió la vida un chofer portugués que no pudo saltar a tiempo de él...
Sorteamos, esquivamos y sufrimos miles de baches... –incluso un mega escalón que nos hizo saltar a todos de la moto- pero nada iba a apartarnos de nuestra convicción: Llegar a Zaraguays, y tomarnos unas cañitas en el tubo... je, je, je.... Ni siquiera mi casco –que empezó a desmontarse- pudo apartarnos de nuestro camino; pues paramos un momento, lo montamos... y ala! A seguir...!!

Así pues, unos 30-35 kilómetros antes de Zaragoza, paramos a llenar los estómagos a las nenas... y al ladito de la gasolinera –atendida por un simpático maño que te ponía el carburante con sumo cuidado...-, Nandu descubrió un chiringuito donde refrescarnos. Bueno un chiringuito.... un restaurante, en cuyo recibidor podía cocerse pan...! Pero que una vez dentro, recibías la recompensa de un refrescante aire acondicionado que luchaba por mantener constante la temperatura en aquél local anclado bajo un sol de justicia que freía sin piedad a cuantos estaban bajo él...

De allí ya, fue un salto llegar a Zaragoza.
Recorrimos unos 15 kilómetros, y pillamos una autopista que teníamos que dejar prácticamente a las puertas de la ciudad...
De hecho, terminabas entrando a Zaragoza por el Puente de Santiago; directamente al Pilar...!

Nada más pasar el puente, doblamos a izquierdas, y allí mismo –en Paseo de Echegaray y Caballero- dejamos las cabalgaduras, deseosas de descansar un rato de “trote” y dedicarse simplemente a descansar... je, je, je... Las atamos, dejamos los cascos en ellas... Y comprobamos al darnos la vuelta y entrar por la Plaza del Pilar, que efectivamente... habíamos llegado, por fin, a Zaragoza!!!
Y eran... algo menos de las doce del mediodía. La previsión, cumplida a la perfección: A medidodía, en Zaragoza...

Y en ese punto, uno piensa que ni ha sido tan pesado, ni cansino, ni nada de lo que a priori podría haberse pensado al respeto del viaje... Realmente fue un viaje la mar de tranquillo, ligero, y –gracias a las paraditas, claro...- muy freso. Ya veríamos qué tal el regreso...

Lo primero que hicimos al entrar en la Plaza, fue ir a echarnos unas foticos –prueba gráfica del viaje- justo en frente del Pilar. Y como todos habíamos estado en otras ocasiones en la Basílica... obviamos muy mucho su visita, y optamos por acudir raudos, a otro tipo de “iglesias”... je, je, je...
Pues, ciertamente, hacía ya un calor de tres pares, y había que hidratarse...

Iniciamos el paseo maño –como digo- el la Plaza del Pilar. De allí, fuimos dando un paseo, pasando por delante de las ruinas... por detrás del mercado central –que por cierto, olía a meaos que mataba-, pillamos Cesar Augusto, y fuimos subiendo hasta El Coso... y por allí entramos al Tubo...!
Y para entonces, nuestro nivel de hidratación estaba bastante fastidiadillo... Y es que se estaban alcanzando, unos 30 y tantos grados a la sombra...! Je, je, je... y aún no eran las 13:00...!
Fuimos recorriendo las callejuelas –yo tenía la esperanza de encontrarme con el Calamar Bravo, recuerdo de mis otras visitas a la capital maña...- pero la necesidad pudo más, y nos metimos en el bar Texas.
Aquí, si me lo permitís, pondré unas palabras de Carlos Herrera, que habla del Tubo, y también del bar en cuestión, que elegimos tan acertadamente Nandu, Araceli y yo, para refrescar el gaznate, reposar las patas traseras, y picotear un rato...

Dice así:

-“Es, casi, revivir una ceremonia iniciática entrar por la calle Mártires a ese Tubo que siempre se me antoja un paisaje dejà vu, un derribo permanentemente anunciado, un lento goteo de desaparición, una película melancólica filmada en aquellos años en los que mi tío Rafael, el Herrera que designamos embajador de la familia en Zaragoza, nos llevaba de la mano a una selva decadente en la que florecían las tascas de vino tinto y patatas bravas.

[...]

Resiste el bar Texas, que sigue como lo dejé la última y la penúltima y la antepenúltima vez y que te hace respirar, aliviado, cuando llegas a su esquina y puedes entrar a una memoria que no se desvanece entre bares de cubatas en serie. Las matrículas de coches americanos y los azulejos de refranero popular siguen colgando en las viejas paredes del bar, mientras que, a la par, las lechillas de ternasco, las mejores bravas del mundo –las mejores, ojo— y los boquerones primorosamente albardados te hacen saber que hay barreras de resistencia al avance implacable de hamburguesas dudosas, mexicanadas desnaturalizadas y bocaterías sin alma...”.

Espero que os haya gustado la descripción... a mí me encantó...! Es tal cual...!!
Meterse por esa zona... en ese bar –y otros muchos- con solera, con historia, con poso... es como darse una vuelta por el pasado. Para regresar –irremediablemente- al presente, nada más salir de esas calles. De esa zona. De ese mundo...

Aún nos dimos una vueltecilla más por El Tubo, cuando salimos del Texas, para recrearnos con sus rincones...
Y volvimos a salir por El Coso.
Pensé en pillar Plaza España, y andar por Paseo Independencia... pero eran ya las dos de la tarde, andábamos por los 35 grados; y aunque llevábamos las “de cuero” en el brazo... estábamos sudando como gorrinos y teníamos hambre. Y como aventurarse a buscar un restaurante más “típico” en un domingo de “Expo”, se nos antojaba innecesario. Y más en un viaje en moto como el nuestro... Juzgamos oportuno el meternos en un restaurante chino que se encontraba precisamente ahí: en El Coso. A escasos metros de su cruce con Cesar Augusto...

El restaurante estaba bien. Un pelín –sospechosamente- vacío... Y aunque el servicio era correcto y atento, los cacahuetes que te dan para esperar estaban “pasaíllos”... yo creo que eran los mismos que le sirvieron a Goya en más de una ocasión... je, je, je...
Para esperar... porque lentorros lo fueron un rato... Pero por contra, los platos estaban muy bien, y muy buenos... Y aunque parezca una tontería, el hecho que te sirvan de la forma tradicional –primeros, y segundos-, y no trayéndotelo todo de golpe, como quien da de comer a los tocinos, era de agradecer...
Pedimos infusiones... y estuvimos charlando un rato. Pero cuando la conversación era un caldo perfecto para el “apalanque”, nos levantamos y decidimos que era hora de ir regresando a las motos, e ir planteándose el ir bajando ya...

Así que salimos de restaurante, y rehaciendo el camino que nos había llevado hacia allí –excepto la zona que olía a orines-, nos personamos –al rededor de las 16:00- ante nuestras monturas. Que como estaban a pleno sol... ardían -y nunca mejor dicho- en deseos de coger de nuevo carretera...!!
Allí nos tenéis a los tres, recién comidos y sudando la gota gorda... poniéndonos las chupas de cuero y deseando salir enseguida...! Y que el airecillo fresquito nos refresque el viajecillo...
Pero nos salió el tiro por la culata! Saliendo por el Puente de Santiago, el aire era calentorro, calentorro... Como si un secador gigante estuviese echando aire desde la otra punta... Y lo jodido, es que ese aire nos acompañó gran parte del camino...
Iniciamos así, la “cara b” de nuestra singular aventura...
Y para regresar -como íbamos bien de carburante-, decidimos marchar directamente y sin detenernos... para repostar al tiempo que precisasemos descansar nuestras posaderas...

El regreso no fue tan placentero y tranquilo como lo fuera la ida. Ni mucho menos...!
El aire no afectaba esta vez de frente... y además de ser fogoso, nos venía ligeramente ladeado. Además, el tránsito era mucho más intenso, y la circulación de grandes camiones iba en aumento a medido que avanzamos a lo largo de nuestra ruta de regreso, a través de la N-II...
Una de las vías –dicho sea de paso- con mayor afluencia del país.

Si a la ida tuvimos que detenernos porque mi casco iba a perder la visera... a la vuelta lo hicimos porque se habían soltado los extensores de mi chaleco...! Si es que tenía el día.... Fue, eso sí, una breve parada en la cuneta... y de nuevo a la ruta...!
En esta ocasión –y como sucediera desde que paramos antes de pillar la autopista a la llegada...- Nandu iba delante. La cual cosa me tranquilizaba, pues un servidor se despista con extrema facilidad...
Cosa que quedó patente cuando seguíamos a Huracaan esa mañana en la búsqueda de la A2, en que si no es por Nandu que me avisa, yo tiro recto y los pierdo...
Me limité, pues, a seguir al compañero Nandu en nuestro regreso... Compañero que dicho sea de paso, posee un envidiable callo en el manejo de la burrica...

Nuestra primera parada de refresco y repostage –el tercero en nuestro camino- lo hicimos a unos treinta y tantos kilómetros de Lleida. Nandu aprovecho para echar definitivamente de su casco, a una mosca que venía amargándole desde hacía rato...
Personalmente, ansiaba ese descanso, pues el calor hizo mella en mi cuerpo a nivel de cansancio y sed... Necesité un par de tónicas con cantidades industriales de hielo, para empezar a reponerme... je, je, je...
Nos atendió una muchacha que dejó de serlo hace mucho, con una simpatía poco común... Más bien, inexistente. Qué palo de mujer, señores...! Más parecía que estuviera haciéndonos un favor, que atendiendo la barra de un bar de carretera...
En fin, que nos repusimos en un ratico de estar allí, fresquitos... y nos dispusimos a rehacer camino, previendo la siguiente parada en Igualada.

Más, no fue así...

A la altura de Tàrrega, el compañero Nandu se metió en un área de servicio –la que me metiera yo el día de Bellpuig- pues necesitaba detenerse un rato, y descansar su cuello... Y es que el amigo está enamorado de los cascos abiertos... y en una tarde como aquella, ese tipo de cascos son desaconsejables totalmente...
Así que echamos un pitillo... y descubrimos al entrar en el local –que más parecía el hall de un hotel de lujo...- que allí no se podía fumar. Estábamos de nuevo en Catalunya... ntch!!
Nos tomamos unas sin, y unas claritas... echamos otros pitillos antes de coger las burricas... y reemprendimos camino para casa...
A partir de ahí, el regreso fue más tranquilo que en la zona donde había tantísimos camiones en una carretera tan estrecha...

Con tres carriles por banda, y velocidades que oscilaban de los 100 a 120 kilómetros por hora... no tardamos mucho en llegar a Igualada. Antes de meternos, Nandu me preguntó si entrábamos por ahí o por Òdena... y decidimos hacerlo por Igualada, que seguro que nos cruzábamos con más de una gasolinera... y podíamos intentar de tomar algo en la cafetería “para parejas” que esa mañana estaba cerrada... Pero seguía estándolo por la tarde.
Así que repostamos en una gasolinera situada –casualidades de la vida- justo en frente de donde esa misma mañana tomábamos café, en nuestra primera parada...
De echo, nos fumamos los pitillos, y acordamos donde nos separaríamos, en el parking donde detuvimos las motos por primera vez ese día.
Primera y última parada en el mismo sitio, sin haberlo pretendido... je, je, je...

A partir de ese momento, me puse yo delante... Bajamos de Igualada, cruzamos Vilafranca... y justo después de cruzar Canyelles por la C-15, en la segunda rotonda... servidor cogió la salida a la C32, que me llevaría de vuelta a Sitges a través del más rápido de los caminos a Sitges desde Canyelles...

Nos despedimos con un emotivo toque de claxon, y aunque ya lo hiciéramos en Igualada, sentí la necesidad de volver a apretar manos y besar rostros, para certificar la despedida y asegurar que fue un inmenso placer compartir el día, la ruta y la aventura, son este par de amigos que son Nandu y Araceli...!! Un besazo desde aquí!!

Llegué a Sitges sobre las 21:10, poco más o menos... Y a mi regreso –aparte de los de mi mujer, claro está...- me aguardaba un sms de Huracaan, preguntándome como había ido el viaje de regreso.
Le contesté enseguida... Él había sido una de las “piedras angulares” para llevar a buen término esa aventura. Aunque –desgraciadamente- no nos pudiera acompañar...
Pero habrán más rutas, ya lo verás! Y ya mismo podremos rodar y almorzar juntos...! Que todos estamos deseosos de rutear contigo, Huracaan...!!

Al llegar a casa, y tras saludar –muy dulcemente...- a mi mujer; hice lo propio con Nandu, y le mandé un sms, a ver qué tal habían llegado ellos... A lo que me contestó enseguida. También acababa de llegar...

Y ahí estamos desde entonces... Recordando cómo fue, y esperando que llegue bien pronto la próxima aventura...!! Je, je, je...

Ésta, además de ser la más larga... creo que es una de las más divertidas, distraídas, y aventureras que he hecho jamás en la vida.... así que queda ahí el listón. Alto, alto, alto...

En definitiva: Una salida de puta madre...!!! Je, je, je....!! Se puede decir más alto, pero no más claro... je, je, je....


NaClu2!!!

diumenge, 8 de juny del 2008

Concentración de Sheriffs MG en BELLPUIG.

Por Jaqueton.

Por fin!!! Ole....!!!! Sí!!!!!! Ya tocaba coño...!!! Je, je, je.... Hoy, ocho de junio, tras dos meses desde la última salida y con un par de rutas suspendidas a nuestras espaldas... por fin hemos salido....!! Albricias!!! Yujuuuuuu...!!!

Además, hoy ha sido un día grande... La gloria, ha tocado a esta humilde agrupación de amigos.... Bilú It, mi pequeña, se ha estrenado hoy en ruta; su primera después de ser resucitada de su larga agonía.... Larga vida a Bilú It!!! Je, je, je....
Quien también se ha estrenado con nosotros, ha sido Alejandro. Mi amigo uruguayo, que en su día dio vida a una agrupación motera en su país: PACHUCO (PAra CHUpar y COmer)... Hemos conocido a Huracaan y a su esposa...
El compañero Nandu Intruder me ha regalado... .....

...bueno, no me liaré. Cada cosa a su debido tiempo....

Mejor primero empiezo por el principio, no?? Je, je, je...

Esta mañana me he levantado, y no sabía si estaba soñando... salía de ruta!!! No lo podía creer..... Por finnnnn....!!!!
Salí corriendo al parking, pillé a mi pequeña Bilú It -que tras reparar todos sus problemas se estrenaba hoy en ruta...-, y partí raudo y veloz a buscar a Alejandro. Un compañero uruguayo que se también se iniciaba hoy con nosotros…. Y parece que le ha gustado…! Se ha apuntado sin pensar a la siguiente...!!

Como decía, fui a buscar a Alejandro a Vilanova y me dirigí al punto de encuentro en Cubelles…
No llevaríamos ni cinco minutos cafeteando en la terracita del Foix, cuando llegó Nandu Intruder… y antes de pedirse su cafetín, me regaló una cabeza de marrajo!!! Je, je, je… Lógico, no? Yo soy Jaquetón….. Gracias compañero!!! La verdad es que me has tocado la fibra…!! Muchísimas gracias….

A todo esto, ya había llegado Falcó. Se tomó un café con leche y se fue a casa a abrigarse un poco más….
La verdad es que para estar entrando en la segunda semana de junio, hacía un fresquete poco normal…
Que por cierto, venía solo, pues Lady Falcó no se encontraba muy bien... No sabes cuánto te hemos echado de menos! Desde aquí, un besote guapísima..! Esperamos que teponga bien, y en breve volvamos a tenerte de ruta... je, je, je... un abrazo..!

En cuanto llegó de nuevo Falcó, nos dispusimos a partir…

Y dado que hasta ese momento no estaba nada claro quien ocupaba el cargo de Capitán de Ruta, estaba cantado que se decidiría en el último instante… y así fue.
Y le tocó….. a mi!! Al único que viajaba con acompañante…! Jué….. Y con la moto menos potente....
Pero me dispuse dignamente a dedicarme al cargo, cuyo examen suspendí dos veces en el pasado. Pero hoy a probé!! Ni un fallo...! Je, je, je.... Y con lo despistado que soy, eso es más que un mérito...!!
Sino... que le pregunten a alguno que o me sé....

Total, capitaneé el grupo hacia Bellpuig....
Bueno “grupo”.... hoy más bien íbamos rodando juntos, pues muy muy formados no íbamos. Y es lógico. Al circular por vías rápidas, la distancia entre nosostros era muy superior a la que llevamos cuando salimos de paseo... Así que mucho orden no aparentábamos, pero lo había, lo había...

Subimos desde Cubelles hasta Vilafranca, y de ahí para Igualada a pillar la N-II que nos llevaría a Bellpuig. Pero pasando por Igualada, Nandu sugirió parar a echar un cafetín, y la idea cuajó en mi cerebro instantáneamente... pues la verdad es que el fresquito ya empezaba a tocar los menudillos... je, je, je....
El lugar elegido, fue un bareto carreteríl de Igualada. Alli nos esperaban unos carajillotes, y unas ridículas mesas de pin y pon, que –como bien dijo Nandu- estaban diseñadas para sentarse ahí con un ligue... Pues era imposible echar trago al carajillete, sin –más que rozar- sobar a tu compañero de mesa...!!Verdaderamente, una trampa mortal que me habría encantado conocer de jovencito... je, je, je.... Más de una habría "caído" allí.... je, je, je....!!

Cuando nos cansamos de sobarnos mutuamente –y dado que los vasos cafeteriles andaban vacíos-, cabalgamos de nuevo nuestras burras, y pusimos proa a Bellpuig enfilando la N-II.
La verdad es que nos ha ido bien ir por ese itinerario, y no el que propuse, pues de este modo hemos ensayado un poco lo que será la ruta organizada para el día 22 a Zaragoza...

El trayecto por la nacional ha sido más bien “ligerito”... Sin sobrepasar los límites establecidos, pero sí apurando para llegar prontico a nuestro destino.
Llegando, el día ya estaba bastante arreglado... Pues aunque despejado, amaneció como dije fresquete.
Y aunque el sol ya se dejaba ver cuando estábamos en Igualada, no ha sido hasta que estábamos en Bellpuig, que se ha dejado sentir calidamente.... Bueno, a ratos, abrasadoramente....

Llegábamos a la concentración –sabiamente indicada por la gente de Sheriff- cuando nos llamaba Huracaan. Ni que nos hubiera olido...!
Resulta que hacía un momento que se había ido del recinto! Pero acudió de nuevo a conocernos...
Un tío cojonudo este Huracaan...! Lástima que no hemos podido estar juntos mucho rato... pero en quince días, tendremos la oportunidad de rutear juntos, y pasar un día entero en su excelente compañía... je, je, je...

Allí ha acudido con su encantadora hijita; y el hombre, lo primero que ha hecho ha sido preocuparse por si habíamos almorzado. Estupendo anfitrión, si señor!!

El tema lo hemos solucionado pillando unos tickets la mar de prácticos...
Por 10 €, te daban una camiseta, un llavero, un mapa, un boli, entrabas en un sorteo, y te daban también un ticket con el que canjear unas cuantas cervezas en la ruta turística... la cena del sábado, el pica-pica de después de la ruta... y lo más importante: el kit de almuerzo...!! Que se trataba de un plato de plástico, una servilleta, un par de rebanadas de pan de payés, una botifarra, y un pedazo de botifarra negra. Que dicho sea de paso, estaba estupenda...!!
Además, yo personalmente he salido ganando, pues Nandu a preferido pasar de la negra, y yo –tripero como yo solo- la he recibido con los brazos abiertos.... je, je, je..... qué rica estaba!!

Así pues, cada uno con su kit.... nos hemos dirigido a unas brasas dispuestas a tal efecto, y nos hemos cocinado el papeo.... que aún crudo, ha provocado una segregación incontrolada de saliva en nuestras hambrientas bocas..... jué, qué hambre...!
Con los platos repletos de buen yantar, nos hemos sentado en una mesita terracera, y acompañados por Huracaan, su esposa, y un amigo compañero de trabajo de éste, nos hemos preparado para llenar el buche y refrescar el gaznate... celebrando una entretenida y amigable conversa...
El compañero Nandu nos ha procurado los cafetines, y tras ellos, quien más quien menos se ha pasado por las tiendas.... ha paseado admirando estupendas motos.... ha babeado mirando extravagantes trikers.... Y de regreso a la mesa, y un par de cervezas después, no hemos empezado a plantear seriamente partir...

Así pues, paseándonos y despidiéndonos... no nos hemos dado cuenta y ya estábamos montados en sendas niñas, rumbo a la gasolinera más próxima...
Nos íbamos con muy buen sabor de boca, ansiosos por que llegue el día 22, y podamos disfrutar de nuevo de la compañía de este simpático camionero, motero como el que más, que nos ha abierto las puertas de su pueblo y de su corazón... Como dije: Un tipo estupendo....!

La gasolinera más cercana, estaba como la plaza de toros del Dúo Sacapuntas: Abarrotá!!
Así que hemos pasado de hacer cola, y nos hemos dirigido a la siguiente.... situada en una zona de servicio de Tàrrega.
Allí todos hemos llenado depósito... y Alejandro además, ha saludado a una hermosísima uruguaya, vecina de su barrio en Montevideo, y para más inri, amiga de su hermana...!! Si es que es bien cierto... el mundo es un pañuelo!!! Ja, ja ja...!!!

Llegábamos a Òdena, cuando el compañero Nandu nos ha recordado la necesidad de remojar bien a menudo la campanilla... y claro, qué teníamos que hacer?? Pues nada... Parar, echar unas claritas, analizar como ha ido la ruta.... Y apurar rápido los vasos, pues el cielo empezaba a tomar un tonillo más bien amenazante....

A partir de ahí la ruta a sido por carreteras más sinuosas, y con más ganas de llegar a casa, que de seguir jugándose el chaparrón en la carretera....

Así que, llegando a Vilanova... cada mochuelo tiró para su olivo, dispuesto a descansar un rato, antes de empezar a soñar con la próxima aventura: Zaragoza!!!

Que, ciertamente, será una salida muy guapa.....
Pero ésta de hoy, amigos, ha sido muy especial para mi... la verdad es que estoy encantado de haber podido disfrutarla con todos vosotros.... Gracias...!!


NaClu2!!!!