XV AMOTOnamiento. ULLDEMOLINS.

Por Jaqueton:


Bueno, bueno, bueno.... me pondré con la crónica, que ya se me han acumulado demasiadas en el tintero, y ya he llegado a la barrera psicológica de las tres crónicas pendientes... je, je, je....
Más que nada, porque hace ya más de tres semanas de la primera –casi un mes, para ser exactos-, y es inevitable que se me vayan olvidando detalles... y vosotros no os merecéis eso...

Vamos pues, por la salida del pasado 8 de febrero. Salida fría donde las haya... Pero con un par de huevos, el inefable Fredy... y éste que os habla, la llevamos con una dignidad y entereza.... admirables....!!


Hacía ya varias semanas que esperábamos que llegara el finde en cuestión... La cosa estaba ya más o menos organizada... Pero sucedió un imprevisto, y el compañero Utah & his family, no pudieron salir. Así pues, Fredy, que salía el sábado con los de Rubí... decidió venirse conmigo el domingo por la mañananeja....



Aquella madrugada, me levanté con ánimos de afrontar la que se preveía como una ruta fría de cojones... Además, había hecho un viento de tres pares de pelotas, y se esperaba que por la zona de El Priorat lo siguiera haciendo. Pues es zona de vientos fuertes....

Así pues, me levanté... y me dispuse a acicalarme para acudir a mi cita con Fredy, en LB2... lugar desde el que partiría os prestos.

La ruta a seguir, iba a ser bastante distinta a la que primigeniamente me había preparado; pues en vez de ir por Reus –como pensé en un principio- decidimos ir por Montblanc... Ruta sensiblemente más montañosa, aunque también tranquila... y llenita de curvas...

Cuando llegué al parking a recoger a mi pequeña y adorable Bilú It.... lo primero que hice fue sacar de las alforjas mis soto-guantes, pues presumiblemente aquella mañana podría comprobar su efectividad...
...pero... maldición....!!! Como la semana anterior –día de la calçotada en Calafell- había llovido.... los guantes estaban húmedos...!! Y es que la estanqueidad de mis alforjas, es un tanto utópica...
Total, que me los puse húmedos, y tardé bastante poco en darme cuenta que aquello era contra producente para la temperatura de mis manos, que tardaron en enfriarse... lo que yo tardé en llegar a carretera abierta...! Total, una verdadera mierda... Hice la ruta hasta LB2, deseando llegar para quitarme los guantes...

Y llegué... vaya si llegué...! Dejé a mi pequeña acompañada de un montón de latas –no había una sola burrica más- y me dirigí al local, y luego a la barra...

...donde me encontró –unos minutos después- el bueno de Fredy. Que llegó muy poco después que yo.

Nos sentamos a la mesa, armados con nuestros merecidos cafeles... y celebramos luenga y amena conversa, mientras comprobábamos que sentadas en la mesa de al lado, había tres féminas que....
Vamos, que.....

...que nos tuvimos que ir porque era tarde, y queríamos llegar a buena hora a Ulldemolins.

Pero no veas cómo estaban las jacas! Sobretodo una morenita que me puse....

...me puse el casco después de poner gasolina, y tras acordar con mi compañero que como “el burro siempre va delante, pa’ que no se espante... aquél día también iba a ser yo el capitán de ruta.... je, je, je...

Y partimos!! Raudos, veloces, y abrigadotes....!!! Bueno, mis soto-guantes se habían secado un poco, pero seguían siendo más fríos que e ombligo de un zombi...

Tiramos pues –como dije- dirección Valls... donde, un poco antes de llegar, nos desviamos para Montblanc.... Después de haber pasado sin problemas el Coll de Santa Cristina... y a punto de encarar –sin titubeos- el de l’Illa....

Andaríamos por la mitad de este último... cuando no vi un escalón que hacía la carretera... y claro, me lo comí con pan con tomate, y un poco más y me doy una leche que no veas....! Menos mal que íbamos más que tranquilitos. Por la hora, por la temperatura... y por que nos gusta ir a buen ritmo y sin prisas... je, je. je....

Acabábamos de pasar el Coll.... cuando noté que la rueda trasera de la moto, no agarraba como es debido... y al descubrir que era porque la carretera andaba helada, reduje aún más –si cabe- la velocidad, y mantuve marchas largas... a fin que la rueda agarrase lo mejor posible... haciendo movimientos de lo menos bruscos...
Y qué tensión se pasa cuando uno se sabe rodando sobre hielo...!! La puta...!!!

Así que en cuanto vi una gasolinera donde parar a echar un café, un pitillo... y lo que más convenga... eché el intermitente, y para allí que dirigimos las proas...! Y es que ya teníamos las manos como témpanos..!! Y el dolor empezaba a tocar los cojones sobremanera....

Al detener las burricas ante el bar, unos que estaban sentados en el interior del garito, nos miraron inquisitivamente.... supongo, que por que no entendían que coño hacían por allí dos moteros, en un día tan poco idóneo para andar en burra... Y la verdad, nosotros mismos, a ratos, tampoco lo entendíamos... je, je, je...

En el interior, una chinita muy simpática –aunque no se enteraba mucho de lo que le decíamos- nos atendió lo mejor que pudo. Unos carajilletes, unos cigarrillos... Un viaje al secamanos para calentar éstas... Otro viaje, para secar definitivamente los soto-guantes –aunque no sirvió de mucho.... Y ya estábamos listos para partir de nuevo a la aventura de aquél 8 de febrero.
El amigo Fredy me comentó que llegando a Vimbodí, encontraría un desvío a Prades; y que no lo cogiera... pues pasado el pueblo tenía que haber otro desvío, por el que iríamos mucho mejor.

Así pues, equipados de nuevo, y con energías renovadas... emprendimos de nuevo la marcha por aquellas frías tierras que poco a poco nos acercaban a La Terra Ferma de nuestros amigos Huracaan, Pipeta y Osito...

Pasé Vimbodí.... tras ver el desvío a Prades, y obviarlo gracias al consejo de mi compañero de fatigas... Pasé pues, como digo, Vimbodí... pero no vi otro desvío.... Seguí, esperando encontrarlo en cualquier momento. La carretera ya no estaba helada, pero aún y así, el ritmo seguía siendo “modosito”, a la espera del ansiado desvío.
Pasamos Vinaixa.... y al poco, me paré para preguntar a Fredy.... pero este me preguntó antes a mí:

- Nos hemos pasado, no?

- Me temo que sí... Damos la vuelta?

- No, mejor tiramos un poco más adelante, a ver qué tal....

Y seguimos adelante, a la búsqueda del “desvío perdido”.

A la altura de l’Albi, paramos en una gasolinera donde unos tipo que estaban liados arreglando una furgona, nos atendieron estupendamente y nos dijeron que si dábamos media vuelta, a poco más de un kilómetros encontraríamos un desvío a la derecha....

Y dimos la vuelta... después de quedarnos a menos de 40 kilómetros de Lleida, y a menos de 30 de la casa de Huracaan....

Pero... no había tal desvío....!! Lo que sí encontramos, fue la entrada a Vinaixa.... Entramos, cruzamos el pueblo, y regresamos a la carretera –N-240- que nos volvió a llevar hasta Vimbodí.
Y una vez allí, lo pasamos.... y enganchamos el conocido desvío a Prades que nos encontramos en el viaje de ida.... Vaya vuelta tonta que dimos...! Y con ese frío...!!! Bufff.....!!!

Cogiendo el desvío por Prades... enseguida vimos el cartelito que nos enviaba a Vallclara y a Vilanova de Prades. Paso obligado para llegar a nuestro ansiado Ulldemolins...

Para entonces, las manos las teníamos ya que no nos las sentíamos.... Pero ciertamente, se soportaba bien. Y como la carretera era curvera y entretenida... eso nos distraía la mente, y no nos acordábamos de las manos más que en momentos puntuales...

En un momento dado, Fredy me adelantó... Y como siempre que eso sucede, pensé: “me he perdido...?” Pero no era tal cosa... je, je, je...
Se estaba meando...! Así que unos metros más adelante, cuando el ancho de la vía lo permitió.... nos detuvimos a que mi compañero de aventuras vaciara la bufeta a gusto.
Y ahí hubo el primer aviso de la pequeña de Fredy –la moto, claro-, pues no arrancó con los ánimos propios del viajecito que nos estábamos pegando... Le costó un poco, y eso nos hizo sospechar....

Pero en fin... Continuamos por la divertida carretera, que a trozos, nos permitía ver a lo lejos y en el valle, una mancha multicolor.... De los cientos de tiendas de campaña que se habían montado el día anterior en ese paraje....

Seguimos bajando, curveteando.... hasta que por fin pasamos el añorado cartel: “Ulldemolins”....!! Ya habíamos llegado....!!!! Eran poco más o menos las 11 de la mañana, estábamos helados, cansados de dar vueltas.... pero ya habíamos llegado!! Yuju....!!
Aunque –lo que no sabíamos- era que lo peor aún estaba por llegar....

Buscamos un hueco donde apearnos –bajarnos de la burra...- y dejar nuestras monturas,... Lo encontramos enseguida, pero al quitarnos el casco, y sentir la “brisa” que allí hacía.... y notar en el coco, la temperatura.... Nos dimos cuenta que allí íbamos a pasar más frío que en la moto....!! Jué....!!!

Nos dirigimos, donde parecía que había una hoguera... Pero debido al aire que hacía, la llama era invisible!! Los troncos estaban ardiendo, eso era evidente, pero la llama solo se veía por debajo de estos, donde el aire no alcanzaba....

Yo andaba tiritando cual hojita en otoño... Llamé a mi parienta para darle los buenos días, y comunicarle que ya había llegado... pero no pude. Me castañeteaban los dientes de tal manera, que tuve que colgar con la promesa de llamarla después....

A todo esto, nos acercamos a una barra donde la gente almorzaba unos huevos revueltos.... y se ve que Fredy tenía cara de concentra, pues sin ticket ni ná, nos dieron sendos paquetes de donuts de chocolate, a Fredy un café con leche, y yo me procuré –pagando- un cacaolat. Que estando a temperatura ambiente, estaba frío pa’ tos sus muertos! La virgen!!! Bufff...!!!!

Y así, armados con el pseudo-almuerzo... nos fuimos a la pseudo-hoguera a papearlo sin hambre... Pues ni eso teníamos....!!!

Lo engullimos como pudimos, y echando el pitillo.... le pedí a Fredy que me acompañara hasta el tenderete... que me quería pillar un soto casco. Para así, al menos, minimizar el efecto del aire –ventorro- que sentía en mi cocorota. La pobre....
Y es que con la braga, el wind-stopper, y el gorro... no cubría lo suficiente, y necesitaba algo que tapara más superficie...

Lo pillé, tirité un rato mirando parches con mi amigo... y regresamos a la hoguera a calentar la riñoná... que dejó de dolerme en el momento en que me senté en una silla, y pude relajar mi espalda.
Pero tampoco duré mucho, pues el viento decidió echarnos la ceniza por encima, y salimos de allí zumbando...!

En estas, que vi a lo lejos una dulce y amorosa bandera tricolor... y le dije a Fredy de acercarnos, pues seguramente sería Monty. El lobo republicano y solitario que acompaña a veces a los compañeros de Halcones ML.

Y efectivamente, era él....!! Había pasado allí la noche, y como nos dijo más tarde... había sido muy, muy duro....! Y es que no era para menos.... Viendo el clima de las 12 del mediodía... no hacía falta ser muy inteligente para pensar que a las 4 de la madrugada, aquello debía ser un infierno....!!!

Echamos unos pitillos con él, la charlita de rigor... y viendo que la peña –algunos- no podían arrancar sus burras.... De hecho Monty la tenía en marcha, y no se atrevía a pararla.... El compañero Fredy quiso ir haciendo un pensamiento, pues se olía que la suya no iba a estar muy dispuesta a ponerse en marcha...
Así que nos despedimos de este pedazo de compañero de afición y causa, y nos dispusimos a largarnos de allí, en busca de mejores temperaturas cerquita de la mar....

Efectivamente!!! La burrica de Fredy se declaró en huelga de pistones caídos –y nunca mejor dicho- y no le salía de los carburadores de ponerse en marcha....

...la empujamos.... ....y nada... Yo arranqué la mía, la adelanté un poco, y volvimos a empujarla... Nada.

La encaramos a un pedazo de bajada, que pensé:

- “Si aquí no arranca, ya podemos llamar a una grúa.... y me llevo a Fredy en Bilú It para Vilanova...”

Así que mandamos a Fredy y a su montura cuesta abajo... mientras yo regresaba con Bilú It, para alcanzar a mi compañero abajo de todo....

... llegando a él, oí el rumor frenético del alocado motor de la burra...!! Había arrancado...!! Yuju!!!!
Le bajé el estárter a la bicha, y emprendimos allí mismo el viaje de regreso a casa. Esta vez, encarados hacia Reus-Tarragona, para llegar cuanto antes al nivel del mar.... je, je, je...


Mi pequeña pedía suqui-suqui.... así que acordamos que pararíamos en alguna gasolinera a llenar.... Pero de momento, teníamos un buen montón de kilómetros curveros, por divertidísimas carreterillas que recorrimos a un ritmo más que apropiado...

Realmente, una gozada de ruta para hacer con buen tiempo, y calor, si es posible....

Fuimos bajando –como digo, a buen ritmo-, mientras nos cruzábamos con montones de moteros que iban y venían del AMOTOnamiento....
Y llegando a Les Borges del Camp, decidí parar en la gasolinera, pues mi pequeña ya andaba en reserva...

El bueno de Fredy, se quedó alejado con la suya, sin pararla por si acaso.... y aprovechó a echar un pitillo.
A lo que yo le acompañé cuando hube llenado el depósito, y así juntos descansamos el trasero y comentamos la jugada de regreso.

Mientras, hasta allí llegaron un buen grupo de moteros a dar de beber a sus “bestias”... je, je, je.... Cuando nosotros, justo nos íbamos de allí...

Decidimos aprovechar el tramo de autopista gratuita que hay por la zona, y ahorrarnos así un buen tramo de carretera...
...y así, continuamos el tranquilo y cálido –por fin- viaje de regreso de aquella helada aventura motera...

En cuanto enfilamos la N-340 para regresar rápidamente a nuestra zona geográfica, el bueno de Fredy, compañero excelente, y amigo de descansos en posadas e ignotas tabernas... me comentó, mejor dicho, me preguntó con un gesto explícito... si me apetecía echar una cervecilla... Pues estábamos llegando a Coma-ruga, y allí se encuentra nuestra bien amada Abadía de la cerveza”.
Y yo, que tengo la carne débil y el corazón muy sensible, no me pude contener y asentí con entusiasmo a la propuesta. Je, je, je...

Así que hicimos pausa en nuestra acostumbrada parada rutera, pero con una variante... el amigo y compañero de ruta, no quiso detener su burra –como es nuestra costumbre- en frente del local y lo hizo en todo lo alto de una cuesta muy empinada que empieza justo en la rotonda de al lado.... Yo, le acompañé hasta arriba, y fui testigo del momento en que se atrevió a parar a su pequeña burrica.... Y así, si luego había de nuevo problemas para arrancar, teníamos una estupenda cuesta por la que lanzar la montura y arrancarla como hiciéramos poco antes en Ulldemolins...
Y nada, Fredy montó en Bilú It, y yo dirigí la proa, de nuevo, a las puertas de nuestro garito preferido de Coma-ruga....

Al entrar, comprobé que el billar estaba libre...! Y tras preguntarle a mi amigo, me dispuse a colocar las 15 bolas en el triángulo; y después de jugarnos a cara o cruz el saque.... sacó mi adversario motero.

Clarita para mí.... vermouth para él.... unos pitillines.... y una estupenda partida del juego que más me gusta por delante; después de una estupenda e increíble aventura motera.... Qué más se le puede pedir a la vida, para una mañana de domingo...??

Echamos un par de partidas... Y ciertamente, me lo pasé teta!! Pero el reloj avanzaba impasible... y había que ir haciendo un pensamiento. Y además, hay que pensar que el bueno de Fredy estaba bastante nerviosillo con el tema de la moto. Algo totalmente lógico...
Así que decidimos ir tirando, y a ver qué pasa...

Le monté de nuevo, subimos la cuesta.... se apeó –no se cuescó... se bajo de la moto-, introdujo la llave en la suya.... y.... arrancó...!!!!!

Sí!!!! Arrancó a la primera y sin miramientos!!! Yuju!! Ja, ja, ja....
El bueno de Fredy sonreía satisfecho.... Y aunque la visita al mecánico iba a ser ineludible.... por lo menos la moto arrancó, y eso –un poquito- sí lo tranquilizaba...

Salimos de allí juntos. Enfilamos la N-340... pasamos El Vendrell... Nos salimos dirección Calafell; y como siempre, la retalía de pueblos por la C-31: Calafell... Segur de Calafell.... Cunit... Cubelles.... y en Vilanova i la Geltrú, justo en la salida que enlaza con la C-15, nos despedimos el uno del otro, para reencontrarnos seguramente al día siguiente en el bar, comentar la jornada, y esperar animadamente otra singular aventura motera....
...y es que por frío y humedad que uno pase. Y por muchas adversidades que se encuentren en la carretera; no hay nada como salir en moto los domingos con los buenos amigos....!

Y esa jornada compartida con Fredy, fue para mí... una de las que recordaremos por mucho tiempo y especial, muy especial, cariño....



NaClu2!!!!