dissabte, 9 de gener del 2010

Almuercete chulo, y rutilla tarraconense.

Por Jaqueton:


El sábado 9 de enero, fue el elegido para ir a probar -gastronómicamente hablando- el garito del que os hablara en la crónica de la primera salida del año.
Pero como pasara hace unas semanas... un frente polar estaba azotando a sus anchas la península en general, y nuestras tierras en particular. Y las temperaturas no eran muy apetecibles para rutear.
Algo que carecía de importancia, pues el destino no estaba lejano en demasía...

La noche anterior, estando como estábamos apuntados a la ruta, solamente Moli y yo, acordamos encontrarnos los dos en L3F.
Para así, ahorrarse él un viaje de ida y vuelta de cerca de 40 minutos... y yo, subir por Canyelles. Archiconocida carretera donde -si hace mucho frío y humedad, como era el caso-, el peligro es constante.
Así pues, quedamos en L3F, donde yo acudiría costeando hasta Calafell...

Aquella mañana, me levanté relativamente temprano -me daba mucho miedo que no me sonara el despertador como en la ruta anterior- y la verdad es que salí de Sitges a las 6:50, pensando en parar en Cubelles, para llenar el deposito de mi Bilú It -la que le pronosticaba no más de 15 kilómetros de vida hasta la reserva.
Y así fue. Prácticamente llegando a Cubelles, mi pequeña y dulce compañero de viaje empezó a "ahogarse"... aunque por poco rato, pues frente al Foix, le llené el estómago, y Bilú It -con renovadas energías- cabalgó de nuevo cual valeroso corcel...
Y tan valeroso!! Porque además del frío que hacía ya... a él se sumó un horrendo viento que noté justo al pasar Calafell y encarar proa hacia El Vendrell.

Un viento que debido a la hora -aún era de noche- era especialmente peligroso... pero claro, una vez llegado a ese punto, no se podía hacer otra cosa que "tirar pa'lante"... je, je, je...
Como saliendo de Sitges, ni hacía viento... ni hacía un frío intenso... Ni llevaba soto guantes, ni soto casco. Y claro, tirando ya dirección Valls, a oscuras y con el viento -horroroso- que hacía en aquella zona... El frío era duro de pelar...

Pasando La Papiola, vi un bar abierto, y tentado estuve de parar a carajillear. Pero no. Por 3 ó 4 kilómetros... llegué hasta L3F.
Y vaya si llegué...!! Y un sonoro y furioso "mecagüendiós" que solté cuando vi -como temía en mi interior- que estaba cerrado, sonó iracundo, apagado por el viento...

Serían las 7:45, y como la prespectiva ventosa de esperar encima de la moto no me convenció... me di media vuelta, y regresé al bar que poco antes había visto abierto en La Papiola.
Llegué... Solté a Bilú It... Y pasé dentro a echar un calentón carajillo, y a mandarle un sms a Moli para avisarle de donde estaba parado. Y al sacar el móvil, descubrí un mensaje que me mandara él a las 7:15, y en el que me anunciaba que de no desistir el asqueroso viento... saldría en coche.
A buenas horas mangas verdes...!! Eso me pasa por salir t5an pronto, coñio...!!! Je, je, je... Pero bueno... forma parte -por otro lado- de la sed de aventura de los moteros, no?

Total, que en aquél bar -para más señas, de picoletos- nos encontramos... cafeteamos... charlamos...
Y cuando el día empezó a clarear, pudimos ver sin duda alguna... algunos montes nevados en el -no muy lejano- horizonte.
Así que cuando resolvimos partir de allí, acordamos hacerlo hasta L3F... y almorzar allí mismo. Que la cosa no estaba para muchas rutas, la verdad...

Como siempre, un almuerzo ameno, tranquilo y barato, que nos empujamos pa'dentro con el mayor de los placeres... Y con la tranquilidad de estar bajo cubierto... je, je, je...

En ésta ocasión, la sobremesa charlera fue especialmente extensa. Y al punto de las doce del mediodía, empezamos a valorar posibilidades...

ero el amigo Moli tenía que ir a El Vendrell para recoger el regalo de Betty Boop -pues era su cumpleaños-, y yo tenía que llegar pronto a casa para ver a quien me alquila el parking, para pagarle el mes... y luego prepararme para currar.

Así que decidimos dejar la cervezuela para otro día, y tirar cada cual a sus quehaceres. Que lo más importante -el almuerzo, la compañía y la charla- ya lo habíamos resuelto más que satisfactoriamente...

Y de ese modo, partiendo ambos desde L3F, dimos por terminada la salida -que no ruta-, para esperar pacientemente a la próxima.

Que será, si el tiempo no lo impide, en Sant Sebastià de Montmajor.

Esperemos que el tiempo sea clemente...! Que aquella zona, cuando dice de hacer frío, se las trae... je, je, je...



NaClu2!!!