Barcelona Harley Days - NOCTURNA

Por Jaqueton:


Después de tres años acudiendo a la Harley Days el domingo por la mañana (en mi caso, sólo dos) el año pasado decidimos que para éste, estrenaríamos una nueva “modalidad” yendo el sábado por la tarde-noche.
Evitando así la solana terrible de la mañana… y la aglomeración insana del domingo.
Ya que la mayoría de los compañeros no tenemos interés en calentar las motos –y las pelotas- en el desfile, hasta poner a ambas cerca del punto de fusión del acero… je, je, je…
Así que este año a la hora de organizar la salida… la propusimos en dos partes:
La del sábado. Que la llamamos “Barcelona Harley Days – Night”.
Y la del domingo. A la que llamamos “Barcelona Harley Days – Desfile”. (Para que así, los compañeros que sí gozan de esa ruta urbana, pudieran organizarse para acudir…)

He de decir que los compañeros se comportaron fenomenales conmigo, pues retrasaron la hora de la salida al enterarse que mi menda lerenda plegaba a las siete de la tarde.
Y se lo agradezco infinitamente…! Pero para el año que viene… os aseguro que procuraré librar.
Ya que a todas luces… lo suyo es acudir bastante más pronto para poder disfrutar –como debe ser en una Harley Days- de los stands, tenderetes, exposiciones, y demostraciones genuinamente Harley Davidson.
Porque lo que no es lógico… es que todos esos garitos cierren a eso de las once la noche, en un acto que a las dos de la madrugada todavía está caliente…!!
Si, si… como lo leéis, companys…
A las once de la noche –o bastante antes, si hay que ser sincero- todos esos garitos quedaron cerrados. Dejando la “Harley Days”… sólo con los tenderetes de merchandising motero, los tenderetes de papeo, los de bebercio, y las atracciones.
Vamos, una feria de fiesta mayor…!!
Asquerosa y repugnantemente más cara que cualquier fiesta mayor conocida…
Visitada exclusivamente por compañeros moteros…
Pero una feria de fiesta mayor al fin y al cabo.
Con sus atracciones… sus tenderetes… y su música pachanguera.

La verdad… Si el año que viene vamos a media tarde –aún arriesgándonos a pillar las últimas horas de sol- estoy seguro que disfrutaremos mucho más que éste.
Ya que la idea no era mala… ciertamente no pasamos calor… y lo pasamos muy bien toda la colla. (Que es lo que buscábamos)
Pero nos faltó esa esencia Harley que no acierto a entender por qué la retiraron tan pronto, en un acto creado y organizado sólo para Harley Davidson.
Creo que en ese punto… la organización tuvo un fallo importante.

Ignoro si cada año fue así… Pues éste ha sido el primer año que vamos en sábado. Pero si es así… vaya tela…!



Como dije más arriba, los compañeros tuvieron a bien retrasar la hora de la salida… en función de mi horario.
Pero como suele suceder siempre por la ley de Murphy, la peor avería la tuve –precisamente- veinte minutos antes de plegar. Justo cuando me iba a preparar para acicalarme y darme un fregoteo…!
Así que ya salí rebotado del currelo. Para variar… je, je, je…

Cuando estuvimos todos juntos en la gasolinera del Molino, Juan –nuestro Capi- montó el grupete de ruta… que poco a poco fue devorando todas las curvas de la carretera de Las Costas… que nos llevarían hasta la autovía de Castelldefels.
Y luego, siguiendo a nuestro Cicerone… llegamos a la rotonda del Ikea! Donde nos esperaba nuestro buen amigo Jordi…

Ya con el grupo de la salida al completo, decidimos ir hasta la Harley Days. Pero como no pudimos dejar las burras en el recinto –que estaba a petar-, optamos por dejarlas donde las dejamos el año pasado… y a partir de ahí, movernos a pie.

La primera parada –como tiene que ser- la china del “cafuhielo”.
Local que es ya mítico en ésta salida AMICUS… donde nos atienden bastante bien, nos sentimos a gusto, hay cierta complicidad con la camarera… y eso es lo importante.

Allí echamos una cervecita… hasta que nos juntamos con Jath600, Ana, y demás compañeros del Club 600 Barcelona… con quienes compartimos mesa, y zumitos de cebada… je, je, je…

Luego nos fuimos a la Harley Days… directamente al recinto específico de Harley, donde pudimos comprobar –como apuntaba antes- que todos los garitos concretos de la marca, estaban más cerrados que el culo de un delfín…!!
Vaya tela…

Menos mal que allí nos juntamos con Korty, Belén, Tino, y Manoli… con quienes compartimos un buen rato de charla, risotadas, y cachondeo...!
Justo hasta la hora de volver al chino a cenar… para luego atacar el resto de la Harley Days con el estómago lleno… je, je, je…



Nos despedimos de nuestros amigos, que llevaban allí bastante más que nosotros… y decidimos tirar millas hasta el chino, donde nos cenamos unos bocatas, con papas y allioli… que algunos regamos con sangría… que no se lo saltaba un galgo…!!
Pedazo de cenita en la rue de la Barna… viendo pasar burrancas, contando anécdotas, y pasándolo en grande…!!
Y es que con ésta colla… es fácil pasarlo bien, coñe…!

Una vez cenados, regresamos a la Harley Days… ésta vez, resueltos a darle “la vuelta al ruedo”… oteando todas y cada una de las tiendas que allí exponían.
Vamos, lo de cualquier concentra… pero multiplicado exponencialmente.

Allí vimos de todo…!!

Desde anillos, colgantes, chupas, chalecos, hebillas… pasando por tubos embellecedores, espejos, y cualquier invento que se le pueda ocurrir a la calenturienta cabeza de un motero! Je, je, je…
Mención especial para unos cascos para perros… que no tuvimos cojones de adivinar lo que eran, hasta que nos lo dijo el tendero!
Y eso que lo ponía bien clarito en un letrero!! Ja, ja, ja…

Dando esa vuelta… nos encontramos con nuestros buenos amigos Birraiders…!!
Con Osito y family… Sisco, Tutan…
Besitos, abrazotes, y cariñitos… que duraron bien poco. Pues estaban ya “petados”… y lampando por pirarse a descansar.
Desde aquí… un enorme abrazote para todos, companys…!!!
A ver si pronto le damos forma a ese encuentro que comentamos… que ciertamente, ganas hay un montón…!!

Nosotros tampoco tardamos mucho en pirarnos, la verdad…

Acabamos de darle la vuelta al recorrido –en mitad del cual, saludamos cariñosamente a Jath y Ana-, y tras descubrir unos espectaculares anillos de Star Wars… que para asombro nuestro se vendían a peso… decidimos dar por terminada la visita, e ir tirando para las burras…



Antes de subirnos a ellas… estuvimos –Anna y yo- flirteando con la idea de acompañar a Juan y Boots hasta La Cantera.
Pero ciertamente… el regreso desde allí, hasta casa… iba a ser un putadón.
Así que decidimos dejar correr el invento, y dar por finalizada la fiesta… poniendo rumbo a casa.

Nos despedimos unos de otros… pues ya no pararíamos de nuevo.
En especial, de Carmen…! Que ese día se animó a acompañarnos… y esperamos que lo haga bien a menudo, sí señor…!!

Pillamos las burras… y Jordi nos dio una vueltecilla turística hasta L’Hospitalet, donde Juan recuperó la posición de “Route Captain”… que nos llevaría –por Las Costas- de nuevo al Garraf.

Aquí es donde yo entono un mea culpa tremendo… porque si es verdad que a mí las curvas con pendiente me acojonan… de noche es algo que me abruma, y el ojete se me cierra como la escotilla de un submarino…!
Ruedo lento… freno mucho… y bueno, reconozco que soy un lastre para el grupo.
Así que para ocasiones venideras, optaré por ponerme el último…
…y si bien rodaré a mi ritmo, lo haré tranquilo de no entorpecer a nadie.

Tan lento rodé… que llegamos a Sitges, yendo yo a la cabeza del grupo.
A Pitu se le paró la moto justo al entrar en la autopista…
…justo cuando me disponía a despedirme de todos.
Suerte que Pitufina, si bien da esos sustos… es verdad que pasan pronto, y arranca enseguida.
Así que menos de un minuto ya estaban todos en marcha de nuevo… poniendo –cada cual- rumbo a su casa.

Todos… menos Juan y Boots…! Que fueron hasta La Cantera, donde echaron una cervecita… y en vista que aquello no estaba muy animado, pusieron también rumbo a la piltra…



Y así terminó la experiencia piloto de éste año… en lo que a la Harley Days se refiere…!

Personalmente… dudo mucho que vuelva a ir en domingo, a soportar ese calor asfixiante…
…pero de volver a ir en sábado el año que viene, queda claro que lo suyo es ir a media tarde. Pues por mucho que nos “liemos”… no volveremos más allá de las tres de la madrugada.
Y la verdad… una Harley Days, sin poder ver y montar en una buena “cerda”… no es Harley Days…

Oh, yeah…!!!



NaCluT!!!