diumenge, 21 de juny del 2009

Aniversario en Ruta al Oeste. RUBIÓ.

Por Jaqueton:



La noche del pasado veinte de junio, la pasé trabajando. Tenía servicio de refuerzo… de las nueve de la noche, a las cinco de la mañana… Así que en cuanto plegué del parking, me fui para casa; me duché, me vestí… y salí raudo cual relámpago saliendo del ojete del mismísimo Thor, al parking de nuevo…!
Pero esta vez, a buscar a mi pequeña y preciosa Bilú It. Con quien tenía pensado pegarme una hermosa y divertida ruta dominical, aquella mañana del veintiuno de junio…
Me entretuve echando un pitillo con el compañero que quedó al cargo del garito, y cuando calculé que debía zarpar… puse proa hacia LB2. Punto de encuentro para aquella salida.

Como en LB2 hay gasolinera… y calculando a ojo de buen cubero, llegaba hasta allí de sobras, decidí que llenaría después del cafelote…
El trayecto hasta allí, como siempre, fue tranquilote. Bueno, tranquilote… A la altura de Cunit, observé un carro parado en mitad de la vía. Encima de una de esas isletas con rayas… y a un grupo de chavales que corrían hacia él con no muy buenas intenciones, al tiempo que la lata maniobraba brusca y abruptamente para salir de allí cuanto antes; pues le estaban apedreando!! Yo, que lo veía de lejos, pero cada vez más cerca… acerté solo a frenar, antes de encontrarme en medio del fregao… Menudas pedradas le dieron al coche!
Si llega a ser un día normal –como los de siempre- seguro que esa experiencia me habría despertado en un plis… pero esa mañana, iba yo bien despierto… Así que la agradable sensación de ir despertando con la suave brisilla matinal… fue, inexistente.
Entre La Cantera y Bellvei, en un saliente de la vía, me encontré al tipo del coche; con las puertas del auto abiertas… y él sentado en el suelo con una toalla en la cara. Talmente, como si estuviera llorando… Pero la verdad, no me paré. Lo reconozco…
Hoy al recordarlo, me embarga un sentimiento de remordimiento… pero la verdad es que a aquellas horas de la mañana, y después de lo que vi, cualquiera sabe qué me habría encontrado de haber parado…

Llegué a LB2, y allí me esperaba el compañero Fredy; el incombustible del bueno de Fredy… Que había llegado unos minutos antes que yo. Cosa evidente, pues ante él todavía no estaba la consabida taza de café con leche, ni los restos de pasta… je, je, je…
Así pues, pedimos el “kit” para Fredy, un carajillete desca para mí… y un chucho! Que aquella mañana de empalme, me iba a venir muy bien un poco de azúcar extra para despejar mis sentidos…
Azúcar extra, digo, porque lo que es el chucho, estaba más malo que to’las cosas…. La virgen! Qué bodrio!! Vaya mierda que dan allí cuando uno pide un chucho!!! Con lo ricos que están, y lo poquito que cuesta tener un poco de calidad… pero en fin, ya se sabe qué pasa en los sitios “de paso”, no…?
Justo cuando el compañero iba a procurarse una copichuela de Magno para despertar sus sentidos… entraron por la puerta un par de gossos de esos que dan asco en carretera, y vomiteras y cagarrinas si se te sientan al lado en la barra. Por suerte, se sentaron lejos… pero lo suficientemente cerca, como para imposibilitar a mi colega que se tomara su brandy matutino…

Viendo que se hacía ya la hora de partir –de hecho, era tarde ya…- decidimos no dilatarlo más, y darnos el pirote.

Antes de entrar en carretera, me acerqué a la gasolinera de LB2 a llenar el depósito… pero la señorita que allí estaba atendiendo, tenía que apuntar los contadores de todos los surtidores antes de servir una sola gota de carburante, y como la cosa iba a tardar como un cuarto de hora largo… acordamos dejarlo correr, para llenar más adelante. Pues ya no estaba la mañana como para andar perdiendo el tiempo…

Decidimos emprender –ahora sí- la marcha, y parar en la primera gasolinera que encontráramos por el camino. Que la buena ventura quiso que fuera la de L3F.
Allí llené el depósito, y salimos como alma que persigue el diablo para Montblanc. Pues ese día, la ruta hasta el Ruta, iba a ser sensiblemente distinta a la que estamos acostumbrados a hacer…
Primero, el Coll de Santa Cristina, luego Valls… el Coll de l’Illa… Montblanc… y de allí, a buscar santa Coloma de Queralt.
Que por cierto, fue por ese tramo de carretera, donde nos dimos cuenta que el agradable fresquito que sentíamos durante el camino, se tornaba frío de verdad. Pero frío de cojones!! Los dedillos empezaban a doler, y la nostálgica sensación que nos recordaba el invierno, dejó de ser emoción para empezar a hinchar las pelotas…
Ahora bien, lo que es la carretera desde Montblanc a Santa Coloma, es preciosa para andar en burra…! Pero realmente, una auténtica pasada… Creo que después de la que hicimos el día de Ulldemolins, es la que más me ha gustado por su trazado, por el ritmo en la rodada… y por el placer de sentir los kilómetros desaparecer bajo las gomas… Lo dicho: una auténtica pasada…!

Llegamos a Santa Coloma de Queralt, y al tiempo que cruzábamos el pueblo, buscábamos un bar donde echar el cafelote y calentarnos. Pero no había!! Buscamos, buscamos… pero ni uno!!
Así que sin darnos cuenta, ya habíamos cruzado el pueblo.
Decidimos acercarnos a La Panadella –que está prácticamente al lado- y es donde habíamos quedado con Pipeta y su hijo. Y allí, resolver el problema de temperatura que empezaba ya a ser serio… Y eso el día que empezaba el verano! Que es lo más paradójico del asunto…

Llegamos a la gasolinera, aparcamos las burricas… y entramos al bareto a calentarnos un poquito por dentro y por fuera… je, je, je…
Aún hoy me parece mentira que diga eso en pleno solsticio de verano… pero es así.

Entramos al local, y tras descubrir que no se podía fumar.. y tras localizar donde hacerlo… fuimos a vaciar la bufeta en los urinarios.
Después, pedimos cafelotes en la barra; los asimos, y nos fuimos para el saloncito destinado a los consumidores de nicotina. Donde podríamos fumar plácidamente –cosa que en los tiempos que corren, casi parece que sea delito-, mientras esperábamos a Pipeta.

El compañero Fredy, decidió ir a la barra a procurarse la copichuela de Magno que no pudo tomarse en LB2, y volvió “acollonido” de cómo se pasaban allí con los precios… Realmente, se nota que se aprovechan que el 95 % de los clientes está de paso… Si serán hijos de puta…!!

Al poco, llegaron Pipeta y su vástago. Jesús. Un muchacho de 12 años, guapote y callado… Todo lo contrario que su padre. Je, je, je…
Se procuraron el bebercio… y allí pasamos un rato agradable bebiendo, fumando y contando chistes…
Ah! Y ligando!! Bueno, ligando… Fredy. Que no pierde una tampoco. Ja, ja, ja…

Concretamente, con una señora maña, hija de Caspe y jotera para más señas… que tras comentar –en voz alta para que la oyeran- que buscaba echarse un novio motero… vio levantarse a Fredy –voluntario él- ofreciéndose a tal empresa.
La mujer, no muy convencida… le invitó a que fuera a su Caspe natal el 15 de agosto; que son fiestas por allí, y ella, que canta en una Rondalla… le enseñaría el pueblo, el placer de las jotas, y lo que fuera menester… je, je, je…. Así pues, ahí queda eso Fredy!! Ya sabes, en agosto… para Caspe!!
Yo… que sentía en mí la necesidad de otro cafelote… fui a buscármelo, junto a una copa para el Casanova de Fredy… Y cuando me iban a echar el ron en el vaso, le pillé la botella por el cuello. El camarero me miró y me dijo sorprendido:

- No era de ron?
- Si… -le dije yo- Pero hazme otro café…
- Pero si está recién hecho…!
- Ya, ya… claro… Ejem. Te he dicho que me hagas un café en condiciones…!
Y el camarero, más que molesto, cabreado como una mona, cogió con toda su mala leche el vaso, y lo estampó en la pica.
Y es que cuando uno se ha tirado dieciocho años de su vida detrás de una barra… ve perfectamente cuando un café está bien, hecho, mal hecho, o lleva –como era el caso- más de cinco minutos reposando en la cafetera, a la espera de que alguien pida uno y se lo cuelen…
Pero –y esto va para el camarero- lo lógico es colarlo en un cortado. Que haces espumita con la leche y no se nota. No en un carajillo, coño! Y menos de ron…!! Que se come la espuma…!

Pero en fin, regresé a la mesa con el carajillo en condiciones, la copa de Fredy… y allí me enteré que Pipeta había pedido algo más que no oí… pero para que no fuera de nuevo a la barra… no le salió de los cojones decírmelo…
Y allí estuvimos un buen rato, dedicados a los chistes, las anécdotas… Pipeta haciendo pitillos sin parar, para llenar la pitillera… Un rato entretenido, vaya…

Cuando decidimos emprender el camino al Ruta, ya se estaba haciendo tarde para cualquier almuerzo… Y es que menos yo, los demás se pensaban que el evento era solo la comida.

Llené de nuevo el depósito… y en perfecta formación fuimos bajando la A2 hasta un poco antes de Igualada. Donde la salida a Ponts-Andorra, nos llevaría hasta la carreterilla de Rubió… Y ésta, a las puertas de Ruta al Oeste.

Llegamos la mar de bien, pero al entrar, descubrimos que no había motos!! Y es que Juan –anfitrión del evento junto a la simpática Merche- había colocado el parking de motos al otro lado del terreno…
Donde –dicho sea de paso- para llegar había que bajar una rampa de gravilla, que era el acojone de todos lo que por ella bajábamos… Una –a mi entender- cagada gorda. Pero también es verdad que con la orografía de aquél terreno, tampoco se podían hacer maravillas…

Así pues, aparcamos las motos, y nos dedicamos a mezclarnos con la muchedumbre que allí había acudido. Que era mucha, y muy buena gente…
Allí encontré al amigo Manolo –al que encontrara el día de Can Joan, bajando a Gavà-, y un par de amigos más… Y cuando se los fui a presentar a Fredy, resulta que habían sido compañeros en el colegio!! Ja, ja, ja…. Si es que el mundo es un pañuelo…!!
Como se iban, nos regalaron la botellica que les sobró del vino del almuerzo, y de la que rindieron cuentas bien seguro, el amigo Fredy y Pipeta, pues ellos sí se quedaban a la comida…

Como era la hora que era, decidimos no almorzar… pues ya era demasiado tarde. Y cuanto más tarde se hacía, más se acercaba la comida… Así que nos sentamos en una mesa con unas birricas… e hicimos petar la cherrada mientras saludábamos a los amigos que hasta allí iban llegando…

Allí pudimos saludar a Quique… a Ruth… Vimos de lejos al compañero Nomada… y otros amigos de Halcones ML…

Muy especialmente, tuvimos el placer de recibir a Huracaan y su encantadora mujercita Merche…!! A quienes no veía desde hacía tiempo…

A algunos miembros de Birraiders MG…

En fin, a un montón de buena gente, con la que coincidimos de vez en cuando. Y con algunos, siempre que podemos…!!

La cosa pues, siguió de charla en la mesa, con birricas y pitillos, y unos melenudos “músicos” que “amenizaban” el sarao…
Yo, sin dormir, sabiendo que no me quedaría a la comida –como todo el mundo que allí estaba-, empecé a rallarme… y decidí que si tenía que tomar una decisión, mejor cuanto antes y sin dolor. En plan tirita… Del tirón, vaya…
Y así lo hice.

Me despedí afectuosamente de mis amigos y compañeros de mesa… y partí a por mi burrica, dispuesto a ir despidiéndome de cuántos encontrara a mi paso. Y así, salir cuanto antes a carretera… y olvidar el mal rollo que me entraba al pensar que no podía quedarme…

Salí a la A2, y de allí crucé Igualada para enganchar la C-15 que me llevaría a mis tierras….

A medio camino entre Igualada y Vilafranca, me uní a una moto en la que iba una parejita… y los pobres se pusieron nerviosos de llevar una moto detrás. Y eso que me coloqué en serreta y respetando distancias y velocidades…! Pero en fin, fuera como fuera, ruteamos juntos…
Y llegando a Vilafranca, otras dos nuevas motos se unieron al improvisado grupo. En serreta también, y dibujando así una bonita formación… Pero la moto de delante –la de la parejita- ya empezaba a estar acojonada… je, je, je…

No fue hasta pasado Canyelles, donde nos separamos. Yo para la C-32 dirección La Blanca Subur… y los otros tres, dirección Vilanova…
Y aunque nerviosos, se despidieron como es menester entre compañeros de ruta. Moteros…

Y aquí terminó para mí la salida ese 21 de junio….

…espero que alguno de mis compañeros, tenga a bien contar el resto de la historia que no viví –comida, sobremesa y tarde-, constituyendo así, la segunda parte de la crónica de ese veintiuno de junio. Inicio del verano de dos mil nueve….


NaClu2!!!