diumenge, 30 d’agost del 2009

Almuercillo temprano en L3F.

Por Jaqueton:



El pasado 30 de agosto…. Mejor dicho, el 29 de agosto, mi menda lerenda curraba de noche, salía a las 6:00, y era genial! Porque así me iba a casa, me duchaba, me cambiaba, y a las 7:00 estaba punto de marcha para lo que fuera…!
Pero no fue así… Me cambiaron el horario, y salí a las 4:00. Así que tuve que hacer tiempo para encontrarme con Fredy.

La idea era un almuerzo tempranero en L3F, y así, como el amigo Moli entraba de tarde -14:00-, y yo iba de empalme… no nos sabría ningún mal retirarnos pronto, por muy bien que lo estuviésemos pasando…


A las 6:30 de la mañana, me encontraba frente al bareto de Roquetas donde acostumbramos a encontrarnos Fredy yo… Pero el bareto estaba cerrado!! Así que le mandé un sms al compañero a eso de las 6:45… y en un periquete se presentó allí, con otro bar en la guantera donde cafetear…

Raudos, nos fuimos para allí… y no solo cafeteamos… Además nos comimos una energéticas porras, que entraban que te cagas…! Je, je, je…
Casi a la hora convenida –pues al camarero casi le tuvimos que pegar para que nos cobrara-, emprendimos la ruta… que en esa ocasión sería por la carretera del pantano.
Una carretera que a mí personalmente, me encanta hacer de subida… y sobre todo a esa hora de la mañana. Un verdadero placer para cualquier motero que se precie, y que guste de los trayectos tranquilos, arbolados y fresquitos…

No tardamos en llegar a L’Arboç, donde nos esperaba un reluciente y espléndido Moli.
El encuentro fue –cuanto menos- curioso….

Llegando al punto, saludamos a un motero que venía en sentido contrario… y era Moli!!!
Paramos, pensamos… y cuando dimos la vuelta para ir a su encuentro, saludamos de nuevo a un motero que venía en sentido contrario. Moli de nuevo!!!
Volvimos a dar la vuelta… y cansados de jugar al gato y el ratón, paramos en una boca de camino donde charlamos y echamos un pitillo… Echamos? Sí, pero Fredy yo…
Moli llevaba una semana sin fumar, y de hecho, ya no fuma! Felicidades campeón!!!

Allí nos estuvo contando las excelencias de vivir sin tabaco… hasta que decidimos emprender la marcha a L3F, pues el tiempo pasaba, y era menester aprovecharlo…

Llegamos a L3F, nos aposentamos en la mesa que ya empieza a ser “nuestra mesa”. Sentados cada uno en “su” silla… Y allí pedimos a la simpática camarera el almuerzo que –por seguir la tradición-iba a ser “nuestro”… je, je, je….

Almorzamos de puta madre! Nuestro vinacho con gas… la cervezota sin de Moli… Nuestros huevos fritos con… El postre de Fredy, y los cafelotes!
Y charlando estábamos, cuando caímos en la cuenta que aquél día el almuerzo era tempranero por las razones antes expuestas… así que decidimos emprender la marcha para otro sitio, y disfrutar así de una completa –aunque concentrada- mañana motera…

Liquidamos nuestra cuenta –que en L3F suele ser liviana-, y emprendimos ruta a Coma-Ruga.
Donde tomaríamos algo, mientras echábamos un billarín…

Llegamos, y el billar estaba libre!! Yuju!!! Ordenamos bebercio en la barra, que sufragó el bueno de Fredy, y cuando nos dispusimos a billarear… estaba estropeado!
Menos mal que el muchacho del bar nos sacó –que no tocó- las bolas, y pudimos empezar la partidica.

No tardamos en darnos cuenta que, bola que colábamos… bola que salía de nuevo… Así que echamos la primera de las partidas –que perdí… tras entregarle al muchacho el precio de otra partida –que aunque cachondos, somos ante todo honrados-, empezamos la segunda de las partidas –que también perdí…

Así las cosas, y tras comprobar que no era mi día para el billar, decidimos sentarnos en una mesa a platicar un rato, mientras terminábamos de apurar nuestros vasos.
Vasos que Moli se ofreció a llenar de nuevo, pero por la hora, por el cansancio que yo acusaba –aunque el café me mantenía en lo alto-, y por no retrasar más a Moli, rehusamos agradeciéndoselo en el alma…

No tardamos en marchar de allí, los tres juntos, cual tres mosqueteros…

Nos despedimos de él en el punto kilométrico de siempre, a la vez que Fredy y yo también nos despedíamos donde de costumbre.
Regresando así cada cual a su casa… a la espera de la siguiente y no menos emocionante salidilla dominguera, rutera, y almuercera… je, je, je….


NaClu2!!!!