diumenge, 5 d’abril del 2015

Salida bocadillera... a BEGUES.

Por Jaqueton:


El cinco de abril pasado… celebramos –porque no se puede decir de otro modo- una de las salidas que más duras se nos han puesto en –juraría- toda la historia de AMICUS.
Nada más y nada menos que hasta en tres ocasiones… tuvimos que suspenderla y aplazarla, por una u otra razón.

Tres ocasiones en las que depositamos toda esperanza en la siguiente…

…y éste cinco de abril, menguando no más que un día completo para que se cumpliera el aniversario de aquél domingo seis de abril del año pasado, en que se propuso por primera vez ésta salida… por fin pudimos celebrarla…!!

Oh yeah…!!!

Así pues… discúlpenme vuestras mercedes si cambio una palabra por otra. Pero como comprenderán… la ocasión bien lo merece. Y tras disfrutar completamente una salida como ésta –de rancio abolengo- no puedo si no exclamar:

A la cuarta va la vencida…!!! Je, je, je…



La salida en cuestión, era una bocadillera…
Una salida en la que nos llevamos el bocata de casa, y nos lo vamos a comer –en mitad de una buena ruta- en un lugar cómo y apetecible.
En ésta ocasión… las barbacoas de Begues…!!
Lugar que se encuentra prácticamente en medio de una de las rutas más curveras y divertidas, de cuantas nos echamos entre pecho y espalda en ésta zona nuestra…

Nos juntamos en la Sede –como rezaba la lista- Pepe, JuanPoti, Juan Ninja, y quien suscribe.

Allí echamos los cafelotes… y enfrascados como estábamos en la conversa, disfrutando del momento… no nos dimos cuenta, y salimos un buen puñado de minutos después de la hora de salida.
Cosas que pasan cuando se está a gusto, y Cronos baja a echar el cafetín con nosotros…



JuanPoti –que en ésta ocasión capitanearía el grupo- lo ordenó de la siguiente manera:

Primero él, a lomos de su intrépida… y abriendo el camino al resto de la colla.
Segundo mi menda lerenda… reposando las joyas de la corona en el lomo de mi querida Guillermina.
En tercer lugar… Juan Ninja. Que debido a un par de sustillos con montura, no debía ocupar la última posición. Pues sin motivo aparente –de vez en cuando- Ninja se para en plena marcha… y ante tamaña faena, no convenía tenerla en última posición.
Y cerrando el grupo, como Moto Escoba, y cubriendo las espaldas a todos… desde lo alto de su descomunal y bermeja cabalgadura, Pepe…!

Todos juntos salimos de la Sede… poniendo rumbo a nuestra querida y vieja amiga, la N340.
Nos metimos en ella en formación… y la devoramos kilómetro a kilómetro hasta llegar a Avinyonet. Donde doblamos a manos fascista… encarando los mascarones a la carreterilla sinuosa y divertida, que nos llevaría –en Fila India por supuesto- hasta la barbacoas de Begues…!!
Después de zamparnos una buena colección de curvas… que nos iba iluminando un intermitente Lorenzo. Ya que los pinos de aquellos lares tapaban y destapaban a capricho su iluminación… ahora haciéndonos rodar en penumbra, ahora deslumbrados por el fulgor de nuestro astro rey…



Cuando llegamos a las instalaciones… no pudimos dejar de sorprendernos de la cantidad de personal que allí se encontraba, dispuesto a ponerse literalmente hasta el ojo pequeño –en confianza, ojete- de carnaca y calçots…!
Como diría el malogrado “Purga”… la plaza estaba abarrotá…!!

Aunque el mono tema entre nosotros… fue la temperatura.
Los más delgaditos de la colla –Pepe y Juan Ninja- llegaron congelaícos…
JuanPoti –si bien no se quejó de ello- también comentó que la mañanuela estaba frescota…
Pero mi menda lerenda, vistiendo sólo camiseta… y chupa de verano, reconoció que ojalá aquella temperatura la tuviéramos todo el año…! Je, je, je… Aunque seguramente el hecho de poseer una capa de grasa más gruesa, y porcentualmente superior a la de un oso polar ártico, tuvo mucho que ver con mi opinión…! Ja, ja, ja…

Allí almorzamos –después de procurarnos el bebercio en la barra- sentados en los bancos de cemento que hay para ese uso.
Aunque Juan Ninja ja se preocupó de elegir una mesa con línea directa al Lorenzo…

Allí almorzamos… y luego cafeteamos –ricamente- en la barra. Donde disfrutamos de una corta sobremesa… ya que las monturas –y nuestros traseros- reclamaban su ración de asfalto…!!



Salimos de las instalaciones, comentando que no tardaremos en repetir… pues la rutica en sí, es muy guapa. Y es una pena que muchos se la hayan perdido por haber terminado haciéndola en domingo de semana santa…

Aunque esperaremos un tiempo prudencial para proponerla, y buenas fechas serían a finales de verano.
Cuando el calor todavía “atormente”, y el frío no sea más que un nostálgico recuerdo…



La segunda parte de la ruta nos llevaría hasta Gavà y Castelldefels. Donde nuestro capi del día nos guió hasta el paseo… para rodar parte de la ruta con aires salobres.
Y donde nuestro Juan Ninja se distrajo… y por poco se come el coche de delante, cuando éste frenó de golpe.
Menos mal que no fue más que un sustillo… y todo quedó en una anécdota que –con el tiempo- ya ni recordaremos.

De allí nos fuimos para Las Costas. Popular, sinuosa, y divertida carreterilla que recorremos siempre que podemos…

…y que en ésta ocasión vendría –como la plaza de antes- abarrotá…!!

Domingo de semana santa… solete bueno en tó lo alto… “pixa pins” y “oquémacus” en fila india para Sitges.
Así que cuando a Juan se le hincharon las pelotas de chuparle el culo al coche de enfrente… decidió parar en uno de los apartaderos, y que Pepe se fumara un pitillo… je, je, je…
Oh… qué tiempos aquellos en los que parábamos todos para fumar…!! (Sic)

Allí estuvimos un ratuelo comentando la jugada… pero al poco ya nos tenían vuestras mercedes de nuevo sobre las burras.
Devorando curvas y asfalto…
…y llegando a La Blanca Subur, donde nos echamos unas cervecitas –como es costumbre- en Can Gregori.

Allí, en la terracita de fuera… nos echamos unas birras y nos empujamos –JuanPoti y yo, porque Pepe y Juan Ninja estaban desganaos- el picoteo que sabiamente nos habían puesto con los zumitos de cebada…

Allí conversamos largamente, comentando la mañana… la ruta… y las anécdotas.

Y allí también nos despedimos… porque éste que os habla tenía que ir para casa a prepararse para entrar a currelar en breve.

Así que después de los abrazotes, arrumacos, y besicos de rigor…

…nos despedimos mientras mis tres amigos se preparaban para la ruta de regreso, y mi menda lerenda se perdía calle abajo.
Poniendo rumbo al parking… donde dejaría a su querida Guillermina.


Y Guillermina –desde entonces- duerme en el parking soñando con la ruta del próximo día diecinueve.
Que si bien es cierto que no será tan curvera como ésta…

…no es menos cierto que será –por lo menos- igual de divertida…!!!

Oh, yeah…!!!



NaCluT!!!